La cerveza que voló
muy ALTO
Raúl De Mingo Rueda es un coleccionista valenciano, con aires manchegos precisa él, que colecciona cualquier artículo relacionado con la marca de cerveza "El Aguila", ya desaparecida, además de botellas nacionales antiguas serigrafiadas y con relieve. En este comentario hablaremos solamente de su colección de artículos de la marca "El Aguila".
Empezó con esta afición de reunir todo lo que encontraba de dicha marca, en el año 2009, aproximadamente. Entonces dejó de lado todo lo que había acumulado de otros países relacionado con la cerveza, como más de 1.300 botellas extranjeras, y se centró en la producción nacional, pues se dio cuenta que controlar un escenario tan amplio no era posible.
El hecho de que se interesara por "El Aguila" fue porque su padre trabajó 44 años en esa empresa, concretamente en la factoría nº 3 de Valencia, así es que existe una vinculación personal.
La cerveza "El Aguila" se fundó en Madrid en 1900, siendo su propietario Augusto Gómez Blanco. Estaba ubicada en la calle General de Lacy, próxima a las estaciones Delicias y Atocha y tenía vías propias que comunicaban la fábrica con la red ferroviaria de mercancías que unía Atocha con Príncipe Pío. La primera cerveza de esta marca salió al mercado el 1 de abril de 1903.
Cuando llegó la Guerra Civil, algunos directivos fueron asesinados y la fábrica fue incautada por los republicanos. En 1939, tras la toma de Madrid, los dueños la recuperaron y, después de las debidas reparaciones, sobretodo en los silos y zonas de fermentación que habían sido muy dañados, se reinició la producción. En los años siguientes la compañía fue creciendo, absorbiendo pequeñas fábricas ya existentes en otros lugares, como "La Mezquita" de Córdoba y, además, construyó en Valencia una nueva fábrica.
La política de adquirir pequeñas fábricas ya existentes continuó, pero en 1969 se construyó una nueva fábrica en San Sebastián de los Reyes (Madrid) donde se trabajó hasta el año 1982. Antes se había puesto en funcionamiento otra en Zaragoza, en 1968.
El grupo de "El Aguila" se hizo líder del mercado nacional. Un gran éxito de la empresa fue la producción en 1960 de Carlsberg. Su afán innovador le llevó a comercializar la primera botella de envase no retornable que se hizo en España y también la primera que presentó la cerveza en lata.
Como curiosidad es interesante saber que Fraga Iribarne fue nombrado director de la compañía en 1970, cuando dejó de ser Ministro de Información y Turismo, y en el corto tiempo que desempeñó dicha función se puso a la venta la cerveza "Aguila Dorada".
En el año 1984 la firma holandesa Heineken se hizo con el 32% por ciento de la compañía española y al año siguiente ya se dejó de producir en la antigua fábrica de la calle Lacy de Madrid. Finalmente Heineken absorbió a "El Aguila" y al Grupo Cruzcampo, con quien se había fusionado.
En los años 90 la marca "El Aguila" seguía vigente aunque se fueron introduciendo novedades para que el nuevo nombre que Heineken le había asignado, AMSLEL, fuera ganando terreno en el mercado cervecero. Primero fueron unas transformaciones en el logo, después la aparición de las dos marcas juntas "El Aguila" Cervezas-Amslel, ocupando el primer lugar la marca española. Posteriormente fue al revés, Amslel-"El Aguila" y, finalmente, en el 2008, ya quedó solo la marca Amslel.
Estos cambios en la empresa, quedaron bien plasmados en los distintos productos que fabricaban. Así, pues, vemos por ejemplo que las botellas de vidrio de la primera época, en la que aparece la marca "El Aguila" muestran el escudo de Madrid con el oso y el madroño. Cuando se añadieron nuevos lugares de producción, como Córdoba y Valencia, también se hicieron constar en envases y chapas.
Entre los artículos acumulados por Raúl hay de todo, pero probablemente lo que más tiene son etiquetas. Entre los objetos preferidos de su colección figura una botella que guarda muchos recuerdos para él, y nos cuenta el por qué.
Resulta que a la bisabuela de Raúl se le cayó el tejado de la casa, hundiendo gran parte del edificio. Cuando años más tarde fue un día con su padre a visitar lo que quedaba de casa y ver los destrozos, el padre de Raúl le señaló el lugar donde dormía él cuando era pequeño, y Raúl se asomó para verlo. Nada más entrar ¡sorpresa! se topó con una estupenda botella de "El Aguila" que ya no contenía el rubio elemento sino trementina, producto muy utilizado antiguamente para múltiples menesteres.
Aunque no tengan tanto significado como esa pieza, todas las que tiene son importantes para la colección de Raúl, y él sigue incrementándola ya sea adquiriendo nuevos ejemplares siempre que le es posible, o gracias al contacto con otros coleccionistas, pues conoce a muchos. El hecho de que haya coleccionistas que se dediquen solamente a un artículo, ya sea chapas, cristalería, latas, abridores, etc. muchas veces de una sola marca, facilita los intercambios.
Nuestro coleccionista tiene un blog donde va registrando, poco a poco, todas las piezas que tiene. Ha abierto muchos apartados, porque la cantidad de artículos diferentes que posee es enorme. En este momento, por recordar algunos, mencionaremos: abrebotellas, alfileres de corbata, bandejas, botellas, calendarios, cartas, carteles, chapas, ciclismo, cristalería, documentos, equipación deportiva, fotos, pins, posavasos, postales, publicidad, radios, relojes...
Hablando de publicidad, no hay que olvidar que la marca "El Aguila" prestó una atención especial a la propaganda, lanzando campañas de promoción en todos los medios, patrocinando diferentes deportes y muchas otras actividades. Algunas de esas campañas se hicieron muy populares ¿quién no recuerda, si ya es un poco madurito, aquello de "Siempre igual, siempre igual, cerveza "El Aguila" siempre igual..."? por cierto... ¡que gran mentira!