SIEMPRE
te
RECORDAREMOS...
Meritxell Roca es una persona alegre y animada, que tiene una colección que "impresiona" bastante al común de los mortales... y ésto sí que es una manera de entrar rápido en materia, porque el tema de la colección se presta mucho a hablar, precisamente de eso, de mortales, de inmortalidad, de muerte... También de cariño, recuerdos, amor y otros aspectos positivos que se pueden encontrar si se examinan, con atención y de forma optimista, las piezas que ella colecciona.
Y, después de esta introducción cabe preguntarse, pero ¿qué es lo que colecciona Meritxell Roca? pues nada más y nada menos que recordatorios de defunciones. Nos referimos a las estampas impresas sobre cartón o cartulina, que se reparten a los asistentes a los funerales. Recordemos que también se utilizan recordatorios en otros actos religiosos, como son las primeras comuniones o las profesiones religiosas.
En los recordatorios de difuntos básicamente se encontran: datos biográficos del fallecido/a; mención de la familia más allegada del difunto; un texto, que puede ser de inspiración religiosa o una reflexión sobre la Muerte, la Vida, el paso del tiempo o un tema relacionado, y una ilustración que suele tener alguna relación con el texto.
Nuestra coleccionista nos cuenta que empezó a coleccionar los recordatorios cuando tenía 17 años, lo que significa que, dada su edad actual, lleva más de 30 años haciéndolo. El primero que tuvo entre sus manos fue el de una amiga a la que tenía un gran cariño, pues había sido como su segunda madre. Aquél pedazo de papel era lo único que le quedaba de ella y una manera de tenerla presente, así es que no era cuestión de tirarlo y lo guardó en un sitio especial. Después llegaron a sus manos otros ejemplares de familiares y conocidos, y se los guardó también.
Dice Meritxell que nunca le pasó por la cabeza hacer deliberadamente una colección de recordatorios, pero al comentar en la "Associació de Col.leccionistes de Corbera" que tenía muchos y todos ordenados cronológicamente, le animaron a hacer la colección y ahora son los compañeros de esta asociación los que más se acuerdan de ella y le guardan todos los recordatorios que caen en sus manos. Aunque tiene algunos ejemplares del siglo XIX, es a partir de 1942 y 1943 cuando ya consigue reunir una representación más importante de cada año.
A Meritxell no le gusta que la gente piense que vanaliza un tema tan transcendente como la muerte, convirtiendo en una simple pieza de colección una muestra de sentimiento y dolor de las familias de los difuntos, al contrario, piensa que guardar los recordatorios es una manera de recordar a todos los que se han ido y de saber algo más sobre su existencia. Además, examinar los recordatorios puede ser un buen motivo de estudio para conocer algunos aspectos de una sociedad determinada.
Hasta hace pocos años, prácticamente todos ellos contenían referencias religiosas, pero actualmente se hacen también para ceremonias laicas. De unos y otros Meritxell examina las ilustraciones con las que se adornan, los textos que ofrecen, etc.
Nos cuenta nuestra coleccionista, por ejemplo, que en los recordatorios suele haber una terminología bastante estereotipada, con muchas fórmulas archiconocidas a fuerza de utilizadas. Se habla de "habiendo recibido los Santos Sacramentos y la bendición apostólica" cuando en muchos casos no es exacto, o de "la desconsolada esposa" o los "apenados y afligidos familiares", el "resignado esposo", etc. También es curioso ver la diversidad de eufemismos a los que se recurre para no llamar a la muerte por su nombre. Se dice, por ejemplo, que el fallecido "se durmió en el Señor", "se fue a la casa del Padre", "descansó en la Paz del Señor", etc. Sin embargo, con los recordatorios laicos estamos ante un nuevo estilo de texto más personalizado, con un mensaje más directo y emotivo. A Meritxell le gustan especialmente las dedicatorias y las despedidas de estos recordatorios.
Si gracias a los recordatorios se consigue información de la sociedad en la que se celebra el funeral, muy interesante es también la que se obtiene sobre la identidad del difunto o difunta. Y lo decimos porque, además de facilitar su nombre completo, se ofrece la fecha de la defunción, la edad a la que ha muerto, el nombre de los familiares más cercanos, a veces la causa de la muerte, tal vez la actividad profesional a la que se dedicaba, si tenía algún cargo honorífico, etc. Digamos que para los genealogistas es un documento importante que puede ayudar mucho en una investigación, así como para los estudiosos de historia local de un lugar determinado. Concretamente, Meritxell está contenta de poder ofrecer a sus paisanos de Corbera toda la información que les puede proporcionar su colección, que cumple la función de un verdadero archivo. De todos modos, en estos últimos años se observa una tendencia a simplificar la información y, en muchos casos, ya no se pone ni el nombre de los familiares ni otros datos de interés. También el formato de los recordatorios ha cambiado bastante, pues aquellas estampas con una gruesa orla negra e ilustraciones en blanco y negro han sido sustituidas por motivos coloreados con una temática menos lúgubre.
Además de lo dicho, hay otros datos que pueden ofrecernos detalles sobre la personalidad del finado/a, pues hasta las ilustraciones de las tarjetas pueden guardar un mensaje, ya que suelen hacer alusión a sus aficiones o profesión. Y es que en ellas no sólo se muestran escenas religiosas, sino que se ofrecen también paisajes de montañas, marítimos, flores, árboles, etc. Los textos suelen ser, desde luego, muy significativos y encontramos desde una oración, a un fragmento literario, unos versos, unas citaciones de algún pensador, un mensaje personal o, incluso una canción, todos los medios de expresión son válidos para intentar ajustarse a los gustos y aficiones de la persona que se quiere recordar.
Si gracias a los recordatorios se consigue información de la sociedad en la que se celebra el funeral, muy interesante es también la que se obtiene sobre la identidad del difunto o difunta. Y lo decimos porque, además de facilitar su nombre completo, se ofrece la fecha de la defunción, la edad a la que ha muerto, el nombre de los familiares más cercanos, a veces la causa de la muerte, tal vez la actividad profesional a la que se dedicaba, si tenía algún cargo honorífico, etc. Digamos que para los genealogistas es un documento importante que puede ayudar mucho en una investigación, así como para los estudiosos de historia local de un lugar determinado. Concretamente, Meritxell está contenta de poder ofrecer a sus paisanos de Corbera toda la información que les puede proporcionar su colección, que cumple la función de un verdadero archivo. De todos modos, en estos últimos años se observa una tendencia a simplificar la información y, en muchos casos, ya no se pone ni el nombre de los familiares ni otros datos de interés. También el formato de los recordatorios ha cambiado bastante, pues aquellas estampas con una gruesa orla negra e ilustraciones en blanco y negro han sido sustituidas por motivos coloreados con una temática menos lúgubre.
Además de lo dicho, hay otros datos que pueden ofrecernos detalles sobre la personalidad del finado/a, pues hasta las ilustraciones de las tarjetas pueden guardar un mensaje, ya que suelen hacer alusión a sus aficiones o profesión. Y es que en ellas no sólo se muestran escenas religiosas, sino que se ofrecen también paisajes de montañas, marítimos, flores, árboles, etc. Los textos suelen ser, desde luego, muy significativos y encontramos desde una oración, a un fragmento literario, unos versos, unas citaciones de algún pensador, un mensaje personal o, incluso una canción, todos los medios de expresión son válidos para intentar ajustarse a los gustos y aficiones de la persona que se quiere recordar.
Nos explica nuestra coleccionista que no en todos los lugares de España es costumbre repartir recordatorios a los asistentes a un funeral. Y, en aquellos sitios que se hace, se han popularizado diferentes tipos o modelos. Es curioso, por ejemplo, que en las islas Baleares se suele poner casi siempre una fotografía del difunto (cuando estaba vivo), lo que resulta bastante chocante en otras partes donde no existe esa costumbre.
Meritxell guarda los ejemplares de recordatorios en álbumes separados, por un lado conserva los que pertenecen a su familia y amigos y por otro los que ha conseguido solamente con ánimo de coleccionar. Estos últimos muchas veces se los hacen llegar personas que conocen su afición y le regalan los que tienen.
Vemos pues, que un recordatorio de defunción es una declaración de muchas cosas. Lo primero que nos transmite es la información de que una persona ha muerto, pero no se trata de un ser anónimo, sino de alguien perfectamente identificado. Acto seguido, se hace otra manifestación importante: ese ser humano no estaba sólo en el mundo, tenía una familia y amigos y todos ellos sienten su pérdida. Y entre otras declaraciones no suele faltar una afirmación decidida de recordar al difunto, "te recordaremos". Meritxell se encarga de ello con su colección...
Pero nada de pensamientos tristes, pues al fin y al cabo no hay nada más natural que la muerte. Ya lo decía Manrique: "... Nuestras vidas son los ríos, que van a dar a la mar, que es el morir...", ¡seguro que han puesto estos versos en algún recordatorio!
21 comentarios:
Entrañable iniciativa, Meritxell. Totalmente de acuerdo en que la iniciativa sirve para recordar a los que se fueron.
Ahora mismo me voy a poner a repasar varios cientos que tengo, de defunción, primera comunión, nacimientos etc....igual acabo coleccionando también.
Un abrazo
Presentada además esta colección en unas fechas tan señaladas, sirve para mostrar algunos de los grandes ilustradores que siempre ha habido en nuestro país. Prueba de ello es esa sensacional y solitaria cruz.
Una recopilación sorprendente y que seguro hace tener todavía presentes a personas que cayeron hace décadas en el olvido. Genial como herramienta para la genealogía.
Disculpa que comente tan poquito, pero entro regularmente... Un abrazo¡¡¡
Hola, Toni, no importa que el mensaje sea corto, lo que se agradece es que te tomes la molestia de dejar un comentario. Como se lo agradecemos a Víctor y Rafael, y a todos los que nos siguen. Saludos,
Hola,jo tambien colecciono recordatorios de difuntos,estampas, recordatorios de comunión,i fotos de puertas de cementerios que si quieres verlas estan en el facebook
Un abrazo.
Hola.
Yo tambien colecciono recordatorios de defunción y me gustaria poder contactar con vosotras, Francesca i Meritxell para poder intercambiar aunque sea opiniones.
Mi correo es : graneres@gmail.com
Por cierto Francesca como te busco en el feisbuc?
Gracias a todos por visitar Procoleccionismo.
David, por ahora Meritxell no tiene dirección electrónica, pero si quieres contactar con ella puedes hacerlo a través de la "Associatió de Col.leccionistes de Corbera de Llobregat", a la que pertenece.
Saludos.
hola amigos
Hola amigos coleccionistas.El otro dia estuvimos en contacto con unos coleccionistas de Berga, un pueblo de Barcelona.Ellos tienen 90000 , si, si 90000 recordatorios de defuncion ,comuniones....,3000 por clasificar, coleccionan cruces y motivos religiosos.Tienen muchisimos repetidos,una casa entera de colecciones,si si una casa no un piso.
En mayo haran una exposicion de cubiertos( 11000)
Un saludo.Carmelo
www.etiquetasdefrutas.es
Hola desde Italia!
me llamo Paola y quisiera informaros que he creado un Blog enteramente dedicado al Coleccionismo de las Imagenes de Santos.
Yo soy Coleccionista y estudiosa de estas pequenas obras de Arte y este noble genre de Coleccionismo: http://ilcollezionismodeisantini.blogspot.com/
Espero recibir pronto Vuestra visita y un mensaje sobre al Blog! Vuestras ideas, asì como Vuestros testimonios de la pasiòn que nos anìma a todos coleccionando estas meravellosa Estampas Religiosas antiguas , tradiciòn importantìsima de siglos de Historia de la Fè Cristiana Catòlica que nos une a todos en el mundo.
Hasta pronto !
Con mucho carino desde Italia,
Paola Galanzi
correo electronico: liberantico@gmail.com
P.S. Tambièn hay un articulo dedicado a los Recordatorios de Difuntos para Meritxell !
A dónde les mando uno.
Hola amigos coleccionistas : les podeis mandar todo lo referente a cruces a :
Carme y Bernad Prada
C/ Pietat nº 18
08600 Berga
Barcelona
Encontré unas cajas de mi abuelo donde había reordatorios de difuntos, de comuniones, estampas de santos, carta-postales con esquela de luto, cromos de Tisane Cisbey...
estoy interesado en su venta a personas que hagan colección
si os interesa podeis contactar conmigo en: pepa.uv@gmail.com
gracias
Hola em dic Marta jo també faig col.lecció de recordatoris m'agradaria poder contactar amb vosaltres. Tinc una gran cantitat de recordatoris alguns de repes. M'agradaria fer comentaris, canvis o simplement parlar-ne.El meu correu es; martalaserra@hotmail.es
¡Buenas! ¿Algún coleccionista de recordatorios de difuntos que sea de Castilla-La Mancha? Es para un reportaje para un periódico. Si es así, podéis escribirme a soylavera@hotmail.com
Un saludo.
Patricia Vera
Tengo 7 recordatorios de los años 60 en perfecto estado y todos diferentes. Si a alguien le interesa, puedo enviar fotos. Precio a negociar o cambio por algo que me interese. Mail: lucas.discat@ gmail.com
hola tengo estampas y postales religiosas asi como estampas de comunion y defuncion me gustaria cambiar con personas que colecionen y les interese mi e-mail es j_m_cerezo@hotmail.com
REgalaría recordatorios de difuntos años , 60 hasta 80.
Tengo el recordatorio de manolete
Hola! Soy coleccionista de recordatorios de defunción, tengo más de 1.500 y algunos de finales de 1800 (el más antiguo es de 1879) Si alguien está interesado puede ponerse en contacto conmigo al e-mail manel.torra@gmail.com soy de Barcelona. Gracias!
Hola, tengo recordatorios de defunción, de comunión y estampas de santos y vírgenes con oración y sin oraciones. Si alguien está interesad@, pueden ponerse en contacto en el correo electrónico menchus2@hotmail.com, un saludo
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