miércoles, 28 de mayo de 2014

Etiquetas de Valdepeñas



A consumir
con moderación




Jesús Maroto colecciona etiquetas de vinos y licores de Valdepeñas (Ciudad Real), y no es nada raro que haya elegido este tema porque él vive precisamente allí.
El municipio pertenece a la provincia de Ciudad Real, comprendida en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha.
Esta gran región de Castilla-La Mancha, además de Ciudad Real comprende las provincias de Albacete, Cuenca, Guadalajara y Toledo, y ofrecen sus tierras la mayor superficie del mundo dedicada al viñedo. Los datos que se dan son de 600.000 hectáreas de viñedo, con el 53% de su producción comprendida en alguna denominación de origen.
Entre estas denominaciones de origen citaremos a la de "La Mancha", que es la que tiene mayor superficie; Valdepeñas, Ribera del Júcar, Mondejar, Manchuela, Uclés, Méntrida, Jumilla, Almansa, Dehesa del Carrizal, Elez... y no sabemos si olvidamos alguna.
Como hemos dicho, Jesús centra su colección en los vinos de Valdepeñas, aunque también está interesado por aquellos que llevan referencias a Don Quijote de la Mancha, ya sea en imágenes o con la utilización de nombres de personajes o lugares aparecidos en la obra de Cervantes. Evidentemente, las marcas que más recurren a este tema son las de la D. O. de La Mancha, pero también se encuentra en los vinos de Valdepeñas.
Jesús nos cuenta que empezó con su colección entre 1996 y 1998. El motivo por el que se decantó por las etiquetas parece la mar de lógico y razonable. Os lo contamos.
Dice nuestro coleccionista que a él siempre le ha gustado guardar las cosas (coleccionista ¿se nace o se hace?), así es que empezó a acumular botellas de vino llenas, evidentemente. Pasado cierto tiempo, se dio cuenta que la colección crecía, pero el piso no, así es que llegó a la conclusión de que, para adaptarse al espacio disponible, había que tomar alguna medida. La solución más acertada que se le ocurrió fue la de ir bebiendo el vino de las botellas, guardar las etiquetas y deshacerse de los envases ¡perfecto!
Después, con un amigo empezó a controlar el tema de las etiquetas, y en seis meses ya tenía unas 2.000.
Como hemos comentado, él está interesado en las etiquetas con la denominación de origen "Valdepeñas", aunque también tiene de otros lugares y puede cambiar tanto de España como de otros países. Ahora cuenta con unas 11.000 piezas. Por cierto, la denominación geográfica "Valdepeñas" es la segunda en volumen de ventas de toda España y tiene atribuido el tercer puesto en cuanto reconocimiento y penetración de marca. Hemos de aclarar que pertenecen a esta denominación diez municipios de la provincia de Ciudad Real, concretamente, además de Valdepeñas, están los de Alcubillas, Moral de Calatrava, San Carlos del Valle, Santa Cruz de la Torrenueva y parte de los de Torre Juan Abad, Granátula de Calatrava, Alhambra y Montiel.
Como particularidades propias de las etiquetas de su tierra, Jesús nos dice que no podría destacarnos ninguna en particular, salvo ese aire de antaño y de solera que lucen muchas de ellas. Los temas que las adornan suelen ser los propios de otros vinos y licores. Además de los relacionados con Don Quijote se encuentran paisajes con vides, imágenes de los lugares donde se producen, escudos nobiliarios, personajes locales, alguna cara bonita...
La tradición del cultivo de la vid en Valdepeñas parece ser que se remonta a la época de los íberos, según ha podido probarse a raíz de los últimos hallazgos en el yacimiento del Cerro de las Cabezas. 
La ciudad de Valdepeñas fue fundada durante la época musulmana en 1232 por la reina Doña Berenguela y durante esos años Valdepeñas se convirtió en una importante área de producción debido a una concesión del Califato de Toledo, que le permitía la elaboración del vino para abastecimiento de la ciudad.
La proximidad del gran centro de consumo que es Madrid, propició la comercialización de los vinos de Valdepeñas en dicha capital. Se cuenta que gracias a los impuestos con que se gravaba su comercio, Carlos III pudo llevar adelante la construcción de obras tan importantes como la Puerta de Alcalá o la Puerta de Toledo. Ya en 1790 se habla de una producción anual de 200.000 arrobas de vino, pero es en el siglo XIX cuando su comercio queda establecido de una forma continuada.
En el año 1861 se puso en funcionamiento un ferrocarril especial que salía de Valdepeñas con destino Madrid, y que estaba compuesto por más de 25 vagones, al que se llamó Tren del Vino, pues era esa la única mercancía que transportaba.Y no era la capital el único mercado que se atendía, sino que el vino de Valdepeñas se exportaba a Filipinas, Cuba y Centroamérica a través del Puerto de Cádiz
De la popularidad de este vino nos puede dar una idea el hecho de que hay varias frases y dichos en los que se habla de el, como por ejemplo, este: "De Valdepeñas el vino y el aguardiente del Moral, y mujeres bonitas Santa Cruz y la Calzá (refiriéndose a Calzada de Calatrava). Pues eso, un vino bueno, que hay que consumir con moderación, pero para la colección de etiquetas ¡cuántas más mejor! 


martes, 20 de mayo de 2014

Dragones y Mazmorras


Tú el bárbaro, tú el arquero, acróbata, magos y el caballero...





Le hemos pedido a Alfonso Galván Jerez que por favor, nos explicara bien el sujeto de su colección, pues andábamos un poco perdidos en esta tema, y él, que es muy amable, se ha molestado en darnos todos los detalles. Nos dice que lo que él colecciona es cualquier merchandising con relación a la serie de dibujos animados de "Dragones y Mazmorras". Su colección abarca desde cosas simples como los vhs españoles, o el álbum de cromos, tebeos, pegatinas, etc. hasta cosas más complicadas de conseguir, como pueden ser los storyboards (guiones gráficos), guiones originales model sheet (modelos de los propios dibujos) y materiales promocionales (posters, anuncios, ropa, etc.).
Esta serie de dibujos "Dragones y Mazmorras", está basada en un juego de rol creado en 1974 por Gary Gygax y Dave Arneson, inspirándose en los juegos de tablero de wargames, y que llevaba precisamente ese nombre.
Es un juego pensado para colaborar en equipo (de 2 a 6 jugadores, incluyendo al Director) para jugadores jóvenes o adultos, en un mundo medieval fantástico, muy inspirado en las novelas de Tolkiem, con el fin de crear cada uno su propio personaje, manejarlo a su antojo, interactuar con los otros personajes, cumplir las misiones que da el Director de Juego o Dungeon Master, progresar el personaje y, lo más importante: divertirse.
Alfonso se declara fan del propio juego de rol, pues las posibilidades de poder crear un personaje a su gusto son ilimitadas (pueden ir desde el típico guerrero humano con ganas de aventuras hasta un mago elfo con sed de venganza). 
Los desafíos del Director siempre han de mezclar la investigación, exploración y el combate de la mejor forma posible, y siempre haciendo que te metas en la historia como si fuera en un libro que estás leyendo. Nuestro coleccionista reconoce que, por ese motivo, algunas personas consideran que el juego es peligroso porque el jugador puede  identificarse demasiado con el personaje, pero el problema es que hay personas un poco especiales y tienen problemas con la realidad, pero eso es completamente ajeno al juego en sí mismo. También podría ocurrirles lo mismo leyendo un libro de crímenes o al ver una película de tiros. Lo normal es que uno sepa discernir qué es lo real y qué es un juego.
Pero, aunque a Alfonso le guste el juego, confiesa que aún es mayor su afición por la serie de animación. De hecho, como le pasa a mucha gente, conoce el juego gracias a la serie. A decir verdad, cuando la serie se estreno en España él tenia 4 meses. Fue gracias a sus padres, que grabaron muchos capítulos para los hermanos mayores, lo que hizo posible que conociera la serie en su infancia. Y, dice que siempre le ha gustado, probablemente por su ambientación, pues siempre le han llamado la atención los dragones y todo lo que evoca el mundo medieval. No obstante, fue a principios de los noventa, al volver a emitirse la serie en Antena 3, cuando se cimentó su pasión por la serie e intentó conseguir todo lo que tenía algo que ver con ella.
El argumento, en pocas palabras, es el siguiente: 
Trata de un grupo de 6 jóvenes que se montan en una atracción de feria y son teleportados a un mundo de fantasía medieval; allí conocen al Amo del Calabozo y éste les da una serie de objetos mágicos para poder hacer frente a las fuerzas del mal en el Reino de Dragones y Mazmorras; sobre todo contra Venger, el malvado hechicero que desea conseguir las armas mágicas de los protagonistas para poder someter  el Reino. Y la canción de la serie, ya sabéis: "Tú el bárbaro, tú el arquero...".
Durante los noventa no pudo conseguir muchas cosas, ya que para esa época ya estaba pasada de moda, y no se encontraba nada relativo a ella. Sólo tenia el álbum de su hermana, un libro, unos pocos tebeos y unas pegatinas recortadas de una carpeta.
Es a partir del 2000, al descubrir internet, cuando se despertó su afán por coleccionar. Empezó a informarse de sitios de venta de cómics viejos, muñecos, libros, vídeos... Luego conoció páginas como Ebay, Todocoleccion, que ayudaron con creces a aumentar su colección. También pudo encontrar una comunidad de fans de la serie (por lo que se dio cuenta que su pasión no era algo único) e incluso empezó a ver la serie en diferentes idiomas (francés, alemán, portugués, ruso...)
La serie en si fue creada por la Marvel Productions y cooproducida por el propio Gygax con el objetivo de fomentar el juego de rol entre los niños, pero curiosamente resultó más compleja, con unos guiones más apropiados para jóvenes y el desarrollo de los protagonistas. También fue una de las primeras series de dibujos animados en causar polémica entre padres y profesores por ser muy violenta (a principios de los ochenta, la industria de la animación la dominaban las series infantiles de la Hanna-Barbera) y por esos problemas y por temas de distribución se canceló en 1985 sin poder acabarse. Aunque existe un guión oficial del último capítulo que nunca se realizó "Requiem" o "Redención" que habla del motivo principal de por qué están allí y su final.
Alfonso nos dice que esta colección es muy difícil de hacer, ya que se trata de una serie que no tuvo tanta repercusión como otras del tipo de G.I Joe, "Transformers" o "My Little Pony 80's" (series que también son de la Marvel Productions). Por otro lado, hay que darse cuenta de que han pasado casi 30 años y muchos de los merchandinsing se van perdiendo (aunque no hay que desesperar, porque hace poco, por ejemplo, consiguió hacerse con un pijama original en perfectas condiciones).
A pesar de todo, está contento con lo que ha conseguido pues, según le comentan otros coleccionistas,  puede decir que no hay mucha gente en el mundo que tenga una colección como la suya (destacan especialmente un español, un británico, dos americanos y un brasileño).
Un dato curioso es que en Brasil llevan emitiendo la serie desde 1987  hasta hoy en día (más tiempo que los Simpsons), y allí sí que ha tenido una repercusión tan grande como las otras series mencionadas.
Y para terminar, digamos que en su tiempo libre Alfonso también se dedica a otra actividad relacionada con la serie, pues, está intentando sacar de la forma más limpia posible la banda sonora original:
https://www.youtube.com/watch?v=ic9jtlyG_lE
¡Gracias por todas las explicaciones, Alfonso!



miércoles, 14 de mayo de 2014

Lote nº 114 de imágenes de casas construidas sobre la vía pública o pasajes


Foto nº 679:  Chía (Huesca). M. J. Fuster
Foto nº  680:  Chía (Huesca). M. J. Fuster
Foto nº 681: Benabarre (Huesca). Daniel G. Fuster
Foto nº. 682: Benabarre (Huesca). Daniel G. Fuster
Foto nº 683. Girona. M. J. Fuster

Foto nº 684: Mónaco. Silvia Montes
Si queréis colaborar en esta colección, podéis enviarnos las fotografías a:
mjfuster20@yahoo.es
¡GRACIAS!



miércoles, 7 de mayo de 2014

Una colección de puzzles




DISCURRIR es hacer funcionar la inteligencia para encontrar la manera de hacer una cosa o la solución de algo.


Joan Fusté, coleccionista reincidente donde los haya, pues se dedica a coleccionar muchas cosas (Blade Runner, reglas de cálculo, Legos, etc.), nos explica que también colecciona puzzles, aquellos rompecabezas que son juegos de ingenio construidos en madera, metal, cuerdas o combinaciones de los tres materiales. También hay versiones en plástico y otros elementos, aunque él se interesa más por los que pertenecen a las tres primeras categorías, madera, metal y cuerdas. Y no es que desprecie los otros materiales,  es simplemente una cuestión de gustos.
Los puzzles tienen una traducción en castellano y, por supuesto, no se trata del término ( no sé si aceptado por la Real Academia de la Lengua) "puzle". Nos referimos al vocablo rompecabezas, nombre bien puesto donde los haya, porque nos parece de gran expresividad, metafóricamente hablando.
De todos modos, quizás la traducción más exacta para el término inglés puzzle sea la palabra acertijo. Esta denominación comprende todos aquellos pasatiempos pensados para ser resueltos o acertados, con el fin de entretener. Se pueden incluir en este grupo tanto las adivinanzas como los crucigramas, jeroglíficos, enigmas, etc. 
Habitualmente se conoce como puzzle el clásico dibujo o fotografía recortado o dividido en varias piezas, donde el objetivo del juego es volver a componer la imagen inicial. Esas piezas pueden ser desde unas pocas a miles de ellas. Normalmente, allí estriba su dificultad, pues cuantas más piezas hay, más complicado resulta recomponerlos. Los puzzles son un entretenimiento muy extendido por todo el mundo, que se empiezan a hacer ya cuando se es niño y apasiona hasta los mayores. Además, una vez que se consigue reestructurar la imagen propuesta, aparece el resultado con una textura particular que añade un cierto encanto a la obra terminada.
Parece ser que dentro de los rompecabezas fueron los puzzles los primeros que se inventaron y fue por un hecho bien casual. Un inglés, John Spilsbury, que hacía mapas, en 1760 recortó uno de ellos por donde estaban marcadas las fronteras, y descubrió que era un excelente método pedagógico para que los niños aprendieran geografía, pues tenían que tratar de unir los diferentes países. Tanto éxito tuvo su idea, que se divulgó rápidamente y estuvo vigente en la escuela pública hasta el año 1820.
Posteriormente, se elaboraron puzzles para adultos, en madera, que eran verdaderas obras de arte.
En el siglo XVII hicieron su aparición por Europa las famosas cajas chinas, que son esas cajas con truco, que para ser abiertas precisan de un proceso de investigación lógica. Están pensadas para salvaguardar su contenido de ladrones y curiosos y abrirlas es un buen entretenimiento.
A lo largo de este último siglo, muchos artículos han salido al mercado con la pretensión de estrujar el cerebro a voluntarios un poco masoquistas, con perdón. Entre los más populares podríamos citar el Cubo de Soma, el Cubo de Rubik, Pentónimos, Tangram... 
Todas estas modalidades o tipos de rompecabezas forman parte de lo que Joan denomina puzzles en 3D y son objeto de su colección.
También incluye en ella aquellos juegos destinados a un solo jugador (solitarios), cuando están hechos de madera, etc.
Lo que nos aconseja Joan es que no olvidemos nunca, que es fundamental disponer de las instrucciones para resolver (reconstruir o dejar en el estado inicial) cada pieza, porque las hay de una dificultad extrema y, la mayoría de los aficionados, sólo pueden reiniciarlos con la ayuda de las instrucciones. 
De todos modos, si hemos perdido los folletos con las explicaciones, que no cunda el pánico, porque gracias a internet eso no es ninguna tragedia, ya que se pueden conseguir. Aunque, ni que decir tiene, siempre es mejor conservar los originales, y más si se trata de una colección.
Joan, a pesar de que le gustan mucho los rompecabezas por el derroche de ingenio que exhiben, por parte del inventor, y el desafío que suponen, para el que pretende superar la dificultad, tiene un pequeño problema, y es que, la verdad ante todo, mucha paciencia no tiene a la hora de intentar resolverlos. Así es que, mira su colección, acaricia sus piezas, se interesa por el funcionamiento, el origen, el material... pero no está dispuesto a poner a prueba la integridad de su cabeza y, por si acaso, prefiere conservarla entera, sin  rompérsela en un juego.
Si queréis conocer mejor a Joan Fusté y sus inquietudes coleccionistas, podéis visitar su página, que también es un buen entretenimiento.