viernes, 18 de junio de 2010

Una colección de "El principito"




Lo esencial


es invisible a los ojos








Hemos conocido colecciones que pertenecen a más de un titular o coleccionista. Hemos presentado a un padre y a su hija que compartían una colección; a un padre con su hijo que hacían otra; a un marido y a su mujer, a una madre con sus hijos, a otra madre con sus hijos, con su hermano y con una vecina, etc. pero nunca habíamos encontrado a toda una institución dedicándose a sacar adelante una colección.

Este coleccionista tan especial es el "Centro Saboyardo de San José ", en Argentina, que reúne a los descendientes de saboyanos (de Saboya y Alta Saboya, Francia). Su directora, la Sra. Maxit, nos explica cómo se inició el proyecto de la colección.

Fue en el año 2004 cuando la Biblioteca Popular de San José, un pueblecito de la provincia de Entre Ríos (Argentina) cumplía su primer centenario. Para celebrarlo, decidieron organizar una exposición de libros y buscaron un nexo que la relacionara con el Centro Saboyardo. Como éste tiene como objetivo fundamental la enseñanza del francés, que es el idioma de sus ancestros, eligieron "El Principito" (Le Petit Prince), porque su autor, Antoine de Saint-Exupéry, era francés.

La exposición consistía en un trabajo de investigación sobre Saint-Exupéry y especialmente sobre el libro. Mientras tanto, y como el Centro es una entidad adherida a la Alianza Francesa, escribieron a las Alianzas diseminadas por el mundo para conseguir diferentes versiones de la obra. Ya tenían la francesa y algunos otros ejemplares aportados por amigos (italiano, inglés, alemán, y español, lógicamente). Muchas Alianzas respondieron. También unas cuantas editoriales enviaron los ejemplares de regalo, así como algunos amigos, especialmente coleccionistas. Hay que decir que en el Centro no compran los libros sino que los intercambian, puesto que para ellos resulta muy caro comprar una versión del libro fuera de su país.

Eligieron "El Principito" porque es el libro más conocido de Saint-Exupéry, pues ¿quién no lo ha leído alguna vez? En la actualidad tienen ya 177 ejemplares escritos en unas 120 lenguas y dialectos diferentes. Tienen versiones en Braille (español y en francés), en chino, guaraní, turco, latín, quéchua, coreano, tuareg, lengua Bambara... Hemos visto en Wikipedia que se ha escrito en 180 lenguas y dialectos, así es que todavía les faltan unos cuantos (¿lo tendrán en euskeda, catalán o gallego?

Siempre hay alguna edición que resulta difícil conseguir. Algunas, como el esperanto o el sardo, están totalmente agotadas y no se han vuelto a editar. En estos momentos los libros más difíciles son los que edita TINTENFASS, una editorial alemana especializada en lenguas que están en peligro de extinción. Deben tener una 15 o 20 versiones que nuestros amigos del Centro San José no han podido conseguir, fundamentalmente porque cuestan 15 euros más gastos de envío y eso representa muchísimo dinero para ellos. Esos libros, los miran por el sitio web de la editorial y cuando aparece algún coleccionista que se interesa por alguno de los ejemplares que tienen repetidos, pues ellos intentan cambiarlo por alguna versión de la Editorial Tintenfass que no tengan todavía.

Después de la exposición inicial han organizado otras, y esa es una ocasión excelente para que los alumnos trabajen sobre el libro, cada uno de los grupos según su nivel de conocimiento.

¿Qué tiene de especial este librito de poquísimas páginas? pues muchas cosas. Es un relato corto de una historia un poco surrealista, una gran metáfora que, con la apariencia de una banal narración infantil trata de cosas importantes de la vida. Brevemente, recordemos el argumento: un aviador (Saint-Exupéry también lo era) está intentando reparar su avión en pleno desierto del Sáhara, cuando encuentra allí a un niño que le dice que es el príncipe de un planeta. Ese planeta es un asteroide pequeño como una casa, en el que no hay casi nada, apenas tres volcanes, dos activos que le sirven para cocinar y uno aparantemente apagado; también hay una rosa, unas simientes de baobabs que son un auténtico peligro, porque si se desarrollaran mucho acabarían con el espacio físico del planeta, y poco más.

El Principito decide un día dejar su mundo, porque no quiere estar solo. Después de hacer unas visitas a los asteroides vecinos, viene a la Tierra para conocer a sus habitantes y tiene suerte, porque tropieza con el aviador, que le comprende bastante bien y con un zorro, que quiere ser domesticado por él. También hay una serpiente, pero no vamos a contar nada más.

Entre la poesía y el humor que cada frase encierra, hay también muchas reflexiones sobre el sentido de la vida y la naturaleza del ser humano. Cada lector las descubre y las interpreta a su manera. Al Centro Saboyardo de San José le gusta destacar el mensaje que transmite la historia sobre el valor de la amistad y el trabajo y, una de las frases del libro que ellos prefieren es la de: "No se ve sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos".

A nosotros también nos gusta mucho todo lo que dice el zorro sobre la importancia de "crear lazos" entre las personas. Y algo que le dice al Principito y que va como anillo al dedo para los coleccionistas: "El tiempo que perdiste por tu rosa, hace que la rosa sea tan importante", que querría decir que nadie puede valorar y disfrutar tanto una colección como el propio coleccionista, porque sabe el tiempo y el esfuerzo que le ha costado.

En el Centro Saboyardo de San José son muchos los que sienten satisfacción viendo crecer una misma colección, su colección, porque, gracias a una buena iniciativa, es algo que comparten. ¡Felicidades! Y para conocerla mejor se puede visitar su estupenda página.



12 comentarios:

Juanot dijo...

Lo compré hace dos años y fue una lectura inolvidable, la trama es una maravilla, transmite energía positiva, nos gustó tanto que este año lo he leido en voz alta a los niños. Merece la pena, las imágenes son chulísimas, ideal para enamorad@s de la vida.

Anónimo dijo...

Muy bien, de verdad!

Amancio

Bernat dijo...

Me gusta mucho esta obra, la leí en mayo/98 por la segunda vez y espero poder seguir haciéndolo a mis hijos y nietos. Creo que las personas que pueden compartir ese mundo imaginario son deveras privilegiadas y muy especiales.

Victor dijo...

Yo creo que su lectura tendía que ser obligatoria (o recomendada) en todas las escuelas!

Genaro Sánchez Fuertes dijo...

Yo se la he leido a mis hijos y les ha gustado mucho.

Alicia dijo...

Muy chebere la pagina, estoy asombrada con un autor Argentino, el escritor Miguel Sandobal. Su libro "Amor sin sentencia", me llevó a buscar mas de el y encontré otro libro asombroso "De padres y angeles"...les recomiendo . Gracias

Argentina-argentina dijo...

Estimados: Los felicito por la página. He leído algunas cosas y me ha gratificado la calidad de las mismas. Quisiera sugerirles si pueden prestarle unos minutos de atención a los escritores argentinos: bien está que un argentino coleccione obras fransesas, pero podría dedicarle más atención a los autores de nuestra patria querida. De esta manera se nos vincula con nuestra esencia. Quizás se puedan leer aquí algunos de sus textos y publicarlos.
Un cordial saludo

Anónimo dijo...

es una colección digna de ver.Felicito a la persona responsable de hacer conocer esta obra a sabiendas del esfuerzo que eso conlleva

Des dera Val d'Aran dijo...

Un libre que liegí de petit

Javier dijo...

Ruego que me informen de como puedo conseguir el libro de El Principito en Castúo "El Principinu" Gracias. Saludos de Javier

Anónimo dijo...

Javier: La traducción de "El Prencipinu" al castúo extremeño la puedes conseguir en la tienda de LOS INJUNABLES en Ebay.es. Un cordial saludo, JAVIER

juan carlos salazar de la prada dijo...

yo tengo un blog dedicado al escritor pero de esta coleccion me quede muy sorprendido y muy alegre que todavia hay mucha gente que le guste esta lectura, es muy bonita y muy apasional.